Volver a la rutina siempre es complicado y más cuando se hace pesado y cuesta arriba. Pero más vale seguir caminando, aunque sea despacio, que estar parado viendo como todo lo demás sigue avanzando, porque el mundo no va a dejar de girar porque tú estés cansado.
No, no lo intentes. Hazlo o no lo hagas. Pero no lo intentes…
Deja una respuesta